viernes, 13 de junio de 2014

Alicia, las manos y Giselle

Las manos de Alicia tienen alma. Casi la misma alma que Giselle, y a veces, cuando habla, parece que las manos dibujan en el aire una coreografía del corazón.
Sensibilidad transparente, sonrisa que no muere y una humildad de otro mundo la caracterizan. Habla con amor, y se acompaña de trazos aéreos que, en ocasiones, la hacen parecer una paloma.
 Giselle vive en sus manos, escondida. Corretea entre sus dedos y le susurra que aún hay tiempo para más, mucho más. No hay niebla que pueda contra tanta determinación y, el paso inevitable de los años acentúa la grandeza de su gloria.

Presentan Upstairs, nuevo corto de Enrique Pineda Barnet

Upstairs o Escaleras arriba, nuevo cortometraje de ficción del reconocido director cubano Enrique Pineda Barnet, tuvo su premier este miércoles en el multicine Infanta de esta capital, en un ambiente que el propio realizador caracterizó como muy familiar.
La producción, con una duración de 12 minutos y la destreza fotográfica de Pablo Massip, narra la experiencia de un vagabundo que escala peldaños interminables en busca de un propósito que, al final, se torna inalcanzable debido al carácter mutable de su esencia.

martes, 20 de mayo de 2014

Entre notas y estrellas: Mozart

A un simple mortal no le alcanzarían 35 años, 10 meses y nueve días para dejar una huella imborrable en el mundo y ser recordado por varias generaciones.

A un ser humano común, no le sería suficiente este lapso para marcar una época y convertirse en referencia obligatoria dentro de la historia musical del universo.
Sin embargo, Wolfgang Amadeus Mozart, resultó capaz de mostrar a la humanidad el carácter divino de su talento en este corto tiempo.
Reconocido universalmente por sus excelsas composiciones, este prodigio llega hasta nuestros días con el mérito de constituir uno de los músicos más amados, escuchados y respetados en todo el orbe.
Nacido en Salzburgo, Austria, el 27 de enero de 1756, Mozart evidenció desde pequeño una suerte de genialidad, desbordada en cada acorde o armonía clásica que interpretaba ante sus padres.

Gabriela Mistral: un nombre atado a la sensibilidad



Recuerdo la primera vez que leí un poema de Gabriela Mistral como una de las experiencias más exuberantes y desconocidas de mi vida.
Esta suerte de lectura me hizo buscar, investigar y, de manera precipitada pero no errada, declararme admiradora eterna de su obra y de ese nombre tan peculiar que todavía hoy recuerdo con precisión: Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga.
Conocida mundialmente por su pseudónimo, esta increíble poetisa nació el 7 de abril de 1889 en Vicuña, ciudad chilena que hoy posee un museo dedicado a ella.
Sin embargo su amado pueblo, como Gabriela decía, era Montegrande y así lo demostró hasta el día de su muerte cuando donó parte de su dinero a los niños pobres de este lugar.

Una comunidad cultural entre montañas y sol



Existe un lugar en el Escambray de Cienfuegos reservado para la comunión perfecta del buen arte y los elementos naturales.
 Aire, agua, tierra y fuego, enriquecen cada día la creación de los residentes en la comunidad cultural Teatro de Los Elementos; grupo artístico creado en el año 1990 y que ocupa desde 1995 el asentamiento Jovero del municipio de Cumanayagua.
Como un pequeño laboratorio para las artes más diversas, los habitantes de esta “ecoaldea” fusionan clásicos de la escena universal con las experiencias de los pobladores locales.

Ay amor! Bola de nieve

Para agasajar la memoria de ese grandísimo de la música cubana, acá les dejo un poco de su corazón y de su alma, esa que le desbordaba el cuerpo y se le escapaba por la garganta.

Yo soy la canción que canto


La legendaria Rita Montaner lo bautizó con su nombre artístico allá por los años 30. La cabeza rapada y la tez negra, le valieron el  simpático sobrenombre que lo consagraría como  uno de los músicos más geniales y carismáticos de la historia del pentagrama cubano.
Ignacio Jacinto Villa,  conocido como “Bola de Nieve”, constituye uno de los artistas más universales que ha dado la isla de Cuba.
 Guanabacoa recibió su nacimiento hace exactamente 102 años y de esa ciudad  -toda una amalgama de tradiciones populares-, absorbió la personalidad  creadora, bohemia y picaresca que lo inmortalizaría más allá de las fronteras nacionales.
Desde su voz ronca pero profunda, interpretó boleros, canciones de cuna y pregones auténticamente criollos, porque  fue un acérrimo defensor de la cubanía.
Temas musicales como Mama Inés, Drume negrito y Tú no sabe inglé, Vito Manué – poema de Nicolás Guillén musicalizado por Eliseo Grenet-, constituyen hoy un mito de la cultura nacional.